No quiero construir desde el miedo

No quiero construir desde el miedo.

Ni desde la necesidad.
Ni desde la estrategia.

Ya no quiero planear mi expansión para que sea digerible.
Ni elegir palabras suaves para que no se asusten.
Ni ajustar mis ideas para que parezca que tengo todo claro.

No quiero hablar para que me entiendan.
Quiero hablar porque si no lo hago, me rompo.
Porque si no lo nombro, no vibra.

No quiero esconder que estoy en transición.
Que a veces no sé cómo salirme del molde.
Que me sigue doliendo tener que justificarme.

No quiero éxito si me tengo que achicar para alcanzarlo.
No quiero amor si tengo que explicarme para que me crean.
No quiero paz si para tenerla tengo que callar mi verdad.

No tengo un manual.
No tengo una fórmula.
Tengo una energía que me quema por dentro y que pide salir sin filtros.

Y sé que si sigo esperando a que todo encaje,
se me va a pasar la vida pidiéndome permiso.

Así que voy a hablar.
Con voz real.
Con canal crudo.
Con todo lo que sé, aunque no lo pueda explicar.

Si eso incomoda, está bien.
No vine a decorar el camino.
Vine a encarnarlo.


Posdata: Si esto te raspa, quizás estás justo en el borde que yo también habité. 

Y si no, quizás no es para ti.

Y está bien.

Comentarios

  1. Hoy te has abierto por dentro!
    El miedo para mí es una emoción parecida a la niebla y cuando andas entre ella poco a poco se va disipando y puedes llegar a ver algo de luz
    Esa luz interior que quiere salir fuera pero que quizás nadie ve
    Esa luz que tú sientes dentro y que quieres que ilumine tu vida y porque no la de los demás porque te sientes fuerte para hacerlo pero por muchos motivos se apaga
    Yo tengo muchos días de luz y otros de niebla , porque la vida es así son momentos…., pero tengo claro que los días de luz los guardo en mi corazón como si fuera el mayor regalo que me puedan dar
    Eres muy valiente con la decisión que has tomado al final, de tu maravilloso escrito y veo que vas avanzar entre la niebla poco a poco , pero si por lo que sea te pierdes entre la niebla sé que volverás a intentarlo porque cuando se toma la decisión de ser real ya no hay marcha atrás
    Así que gracias por tu valentía y sinceridad , solo te puedo decir que la vida te devuelve siempre algo de lo que tú das y en este caso es tu luz
    Gracias!!!

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    Respuestas
    1. Gracias, Veibar.
      Hay algo muy cierto en lo que dices: cuando se toma la decisión de ser real, ya no hay vuelta atrás.
      Por más que uno se esconda, por más que intente adaptarse otra vez… algo dentro ya no encaja como antes.
      Y eso, aunque a veces duela, es una suerte. Porque no hay luz más fiable que la que uno se empeña en no apagar.

      Yo también tengo días de niebla espesa.
      Pero ya no me asusto igual.
      Quizá porque ahora sé que no estoy sola en ella.
      Gracias por recordarme eso hoy.

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